TIENE QUE VENIR PERSONALMENTE

Venezuela al igual que muchos otros países latinoamericanos y del Caribe, avanza como un bólido de la F1 en materia tecnológica. Poseemos ya nuestro primer satélite en el espacio y se estima lanzar un segundo para el 2012.

Ya dentro de poco se nos viene la televisión digital. Cualquier chamo o persona no necesariamente de clase alta, posee un teléfono inteligente. Las tabletas digitales y las señales inalámbricas de conexión a Internet se venden como pan caliente día tras día.

El programa del Gobierno llamado Canaima ha invadido miles de escuelas con estas geniales computadoras para optimizar el proceso de enseñanza y aprendizaje de nuestros estudiantes de escuela primaria. En resumen, pienso que hemos avanzado considerablemente en la aplicación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación no solo en el ámbito educativo sino en las comunidades y en las empresas tanto del sector público como privado.

Ahora bien, si poseemos todo ese avance, si hemos preparado a muchas personas para que se adapten a estos cambios, si hemos invertido cualquier cantidad de dinero para perfeccionar nuestros SISTEMAS, por qué todavía se debe justificar que cuando llamamos a una línea aérea para pagar una diferencia por concepto de cambio de reserva o de boleto se nos diga: “Señor debe pasarse personalmente, eso no se lo puedo hacer por teléfono”. Qué tanto trabajo puede darle a la operadora de chequear en el súper sistema y cotejar con el número de cédula del pasajero la diferencia que hay que pagar y decirle: “Señor, ya hemos hecho su cambio de reserva, debe pagar una diferencia de X, por favor dígame como desea pagar… Con tarjeta de crédito o débito” Pregunto, ¿es esto imposible de hacer?

¿Por qué cuando vamos a solicitar un documento personal: partida de nacimiento, carta de residencia, pasaporte, entre otros, siempre nos piden hasta el papel que diga del mal que nos vamos a morir? ¿Si todo está completamente automatizado con sólo enseñar nuestra cédula, no se debería constatar si somos esa persona? ¿De qué sirve que nos digitalicen tanto las huellas si al final solo resulta para votar o para adquirir una casa?

Siempre me he preguntado cuánto se gasta anualmente en cada institución del Estado en papel, me vuelvo a preguntar ¿Cuándo carrizos vamos a iniciar una real campaña ambientalista y desprendernos de una vez por todas de la bendita fotocopia?

Las sociedades avanzadas han logrado progresar porque dentro de su planificación curricular de gestión ciudadana se toma muy en serio el tiempo de esos ciudadanos. Si se desea avanzar y progresar se trata de buscar los mecanismos para facilitarle las diligencias diarias a los habitantes de un país y permitirles que estos paguen sus servicios, hagan transacciones bancarias, compren boletos y cambien sus reservas, soliciten documentos legales personales, entre muchas cosas más, sin salir de sus puestos de trabajo, hogar o lugar de estudio.

En las sociedades avanzadas el tiempo de sus ciudadanos es oro para el progreso de ese país, porque mientras más tiempo ellos inviertan trabajando y estudiando mejor para el desarrollo de sus naciones. Mientras menos tiempo ellos desperdicien yendo al banco, o a un registro principal o a comprar un boleto aéreo, mejor el beneficio para los ciudadanos y para el avance de los pueblos.

Herramientas como el teléfono, la Internet, el correo postal (Si en realidad se prestara un buen servicio) y la TV digital, pueden resolver el día a día de muchas personas y ahorraríamos tiempo, papel y dinero, mucho dinero.

A pesar de todos nuestros avances en materia tecnológica, todavía pienso que nos falta mucho, pero no de equipos ni de cables ni de satélites, sino más bien de un grupo de buenas personas que se sienten (no por mucho rato) a intercambiar buenas ideas de una vez por todas para facilitarle la vida a los ciudadanos y para lograr el desarrollo que todos queremos.

No quiero que mi hija en un futuro no muy lejano llame a una aerolínea para cambiar su boleto con el cual me va a venir a visitar y la operadora le diga tal como me dijo hoy: “Señor tengo una cola de gente en el mostrador la cual no puedo dejar de atender para decirle cuánto es la diferencia que debe pagar por el cambio de su reserva, usted debe venir personalmente y hacerlo por nuestras oficinas”

¡Chanfle!!!

Ciro García